El fenómeno de derrame

El fenómeno de derrame consiste en que algo que ha sido creado ajeno al individuo con el paso del tiempo acaba influyendo en él. Para poder explicar lo que ocurre en el presente recurrimos muy a menudo al conocido fenómeno de derrame, sin el cual no seriamos capaces de entender la sociedad tecnológica actual.

Lo que nace como instrumento de guerra, por algún motivo se derrama y empieza a empapar a la sociedad y fruto de este derrame empieza a transformarla.

El primer fenómeno que se derrama a la sociedad fue la tecnología del cohete, que en principio se creó para fines armamentísticos y terminó participando en la carrera espacial llevada a cabo por EEUU y la URSS. Este derrame ha afectado en el modo de vida de la población llegando a establecer unas comunicaciones y unos modos de transmisión revolucionarios que han cambiado la manera de ver el mundo en los individuos y ha hecho posibles las conexiones instantaneas y permanentes entre los ciudadanos.

El segundo fenómeno que se derrama es el de la informática, creada con fines militares durante la II Guerra Mundial y poco a poco se fue adaptando hasta conseguir computadores personales para cada uno de los individuos. Con la aparición de Internet el ordenador se convirtió en una herramienta esencial para el acceso al mundo digital. El efecto de la infomática en la sociedad es tan grande que la gran mayoría de actividades de nuestra vida cotidiana dependen de ella.

Por el contrario, la tecnología nuclear no ha conseguido el fenómeno de derrame en la sociedad. La energía nuclear no cumple su sueño de poder producir funciones positivas para los individuos. Tras Chernovil la energía nuclear sufrió un rechazo por la humanidad, además del sentimiento de culpabilidad de la sociedad por la tragedia de Hiroshima y Nagasaki y el pensamiento general de una posible catástrofe durante la Guerra Fría ha hecho imposible que la engería nuclear se derrame y pueda producir efectos positivos en la sociedad.